El yoga y el baile, dos recursos que emplea Täo Porchon-Lynch para mantenerse en forma física y emocionalmente, a sus 98 años es la profesora de yoga más vieja del mundo; pero ademas, ella, como no podía ser de otra forma, vive ilusionada, con una sonrisa en los labios y una aptitud ante la vida que es todo un ejemplo, personas así son las que nos hacen sentir mas jóvenes, pero solo en años, porque el tener esa elasticidad de la que hace gala no se consigue si no es a base de pasarse horas y horas en el gimnasio, ya lo dice el refrán, "El que algo quiere, algo le cuesta".
Impresionado, amigo Toni. Esta chica está en el objetivo correcto y que tu tan generosamente impulsas.
ResponderEliminarPasar por aquí es siempre, una buena forma de cargar las baterías del optimismo.
Un abrazo, amigo
Hola Enrique,tu lo has dicho, el objetivo, que no es otro que vivir el día a día con la ilusión puesta en otro día, en otro evento, en un encuentro..
ResponderEliminarUn abrazo amigo